Romanos 8 es un capítulo de la Biblia donde se enseña a andar conforme al espíritu de verdad. Porque el ocuparse del espíritu es vida y paz.
En el espíritu conocemos la verdadera justicia. (Isaías 26:8-10).
Vivir en el espíritu nos hace entender que todo lo que nos sucede nos ayuda PARA BIEN, en todas las cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó y se entregó así mismo, haciéndose pecador y en ÉL no hubo pecado.
En el paso de cada uno por la tierra se viven procesos diversos, unos que fácilmente entendemos y nos deleitamos; y otros procesos que sólo se entienden por EL ESPÍRITU SANTO; porque es importante identificar que como a hijos se nos enseña.
El anhelo de DIOS es que le conozcamos y le entendamos, y eso sólo será posible si vivimos en el espíritu.
DIOS ES AMOR, y nos ha regalado vida en abundancia por ese amor. (Salmos 106:8).
En el espíritu se manifiesta el Poder (Éxodo 9:16).
Con el ESPÍRITU SANTO fuimos sellados, el cual garantiza la herencia de los hijos de DIOS, (Efesios 1:11-14).
Al leer diariamente la Santa Biblia aprenderás lo sobrenatural de DIOS y hablaremos conforme a lo que DIOS quiere que se haga, pues de ÉL es todo lo que existe (1 Pedro 4:11).
Viviendo en el espíritu se conoce lo verdaderamente valioso y se disfruta de lo demás (Santiago 4:3).
Por el espíritu aprendemos lo que se mueve desde el alma, Proverbios 20:27).
EL ESPÍRITU SANTO nos muestra áreas donde podemos hacer una diferencia en la vida de otros, que sólo se logra en el espíritu que es ministrado, porque el interés está puesto en las cosas de arriba, y no en las de la tierra. (Colosenses 3).
El que no vive en el espíritu guiado por el ESPÍRITU SANTO, hace injusticia.
CLAMAR A DIOS
Y SE RECIBIRÁ SU AYUDA.
SHALOM
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