Devocional Diario: 4 ENTENDER Y CONOCER A DIOS

JUAN
16:7 Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el CONSOLADOR no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.
16:8 Y cuando ÉL venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio. 
16:9 De pecado, por cuanto no creen en MÍ;
16:10 de justicia, por cuanto voy al PADRE, y no me veréis más;
16:11 y de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.
16:12 Aún tengo muchas cosas que deciros, pero ahora no las podéis sobrellevar.
16:13 Pero cuando venga el ESPÍRITU DE VERDAD, ÉL os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, y os hará saber las cosas que habrán de venir.
16:14 EL me glorificará; porque tomará de lo MIO, y os lo hará saber. AMÉN.

JESUCRISTO CON SUS ENSEÑANZAS NOS AYUDA A ENTENDER Y CONOCER A DIOS: Recordemos que en la parte 1 de ésta enseñanza, Jeremías 9: 24, el SEÑOR hace mención de 3 acciones que nos hacen entenderlo: misericordia, juicio y justicia en la tierra; ahora en éste pasaje JESUCRISTO hace énfasis que por EL CONSOLADOR, EL ESPÍRITU DE VERDAD, EL ESPÍRITU SANTO, recibiremos convencimiento de pecado, de justicia y de juicio.
Continua JESUCRISTO explicando:
Convencerá al mundo de pecado, por cuanto no creen en MÍ;
Convencerá al mundo de justicia, por cuanto voy al PADRE, y no me veréis más;
Convencerá al mundo de juicio, por cuanto el príncipe de este mundo ha sido ya juzgado.

ENTENDAMOS EN LA UNIDAD DEL ESPÍRITU:
1- Por el ESPÍRITU SANTO seremos convencidos de pecado, esto es misericordia Divina; por cuanto muchos no creyendo en JESUCRISTO, han depositado su fe en otros dioses y se van en pos de enseñanzas de hombres con el entendimiento entenebrecido, que los hacen errar con palabras y actos, pero DIOS que ve la intención en el corazón del hombre, en el momento que ve su disposición de corazón para agradarle, trae su instrucción, por la impartición del PODER DEL ESPÍRITU SANTO, para sacarlo del engaño y hacerlo permanecer con su firme decisión de entender y conocer a DIOS, LA LUZ DE LA PALABRA DE DIOS les será revelada, mañana tras mañana y cambiarán su forma de pensar y actuar.
2- Por el ESPÍRITU SANTO seremos convencidos de justicia, porque ÉL nos revela a JESUCRISTO, y JESUCRISTO está a la diestra del PADRE, el justo es nuestro intercesor, nuestro mediador, nuestro abogado, ÉL se despojó de si mismo y se humilló hasta la muerte en la cruz, después resucitó triunfando, para que nosotros alcanzáramos GRACIA, fué llevado por el PADRE a su diestra para ayudarnos a vivir en santidad. Sólo por JESUCRISTO somos santos, y el que diga que no peca está diciendo a DIOS mentiroso, porque la lucha no es contra carne sino contra la maldad que habita en las regiones celestes y que influencia a todo aquel que se aleja de la VERDAD, por eso necesitamos el abogado, JESUCRISTO.
3- Por el ESPÍRITU SANTO seremos convencidos de juicio, por cuanto el diablo que es el príncipe del sistema del mundo, fué juzgado y se encontró mucha maldad en él, fué lanzado del cielo con la tercera parte de los ángeles y habitan en atmósferas donde las obras de la carne y los deseos engañosos son manifestados  y debemos entender que en el diablo mora la mentira, porque es padre de mentira y engaño, por eso el ESPÍRITU SANTO nos convence de juicio, para hacer lo agradable a DIOS. Entendemos lo que no glorifica al PADRE, y no lo practicamos; pero si hacemos todo lo que honra su nombre y da gloria a DIOS. 

EL ESPÍRITU SANTO GLORIFICA A JESUCRISTO, por eso es necesario disponer el corazón para tener una mente sensible a su instrucción, porque hablará de los asuntos del REINO DE DIOS, para llevarnos a poder entender, lo que proviene y no proviene del PADRE. En ÉL habita la luz de la Revelación Divina.

OREMOS: PADRE que la fortaleza de TU SANTO ESPÍRITU, esté sobre mi vida, haciéndome entender el camino en que debo andar, porque tu me has prometido que me guiarás todos los días de mi vida, por mi parte perseveraré en tus instrucciones para obedecerlas, hasta que se hagan vida en mí. EN EL NOMBRE DE JESUCRISTO. AMÉN.