Devocional Diario: 29 LA BIBLIA ES LA PALABRA DE DIOS

SALMOS 119
119:153 Mira mi aflicción, y líbrame,
Porque de tu ley no me he olvidado.
119:154 Defiende mi causa, y redímeme;
Vivifícame con TU PALABRA.
119:155 Lejos está de los impíos la salvación,
Porque no buscan tus estatutos.
119:156 Muchas son tus misericordias, oh YAHWEH;
Vivifícame conforme a tus juicios. AMÉN.

AFLICCIÓN: Es cuando se tiene inmensa tristeza en el alma provocada por algún factor interno o externo a la persona. Es angustia por el sufrimiento en respuesta a un peligro o amenaza. Se manifiesta en actitudes de llanto continuo, malhumor, desconsuelo, ira, disgusto constante, inquietud, amargura y otras manifestaciones propias del alma abatida.

Las personas que constantemente están de mal genio es porque existe una saturación en su alma de aflicción y esa es su reacción como un mecanismo de defensa.

DECISIÓN PERSONAL: Siendo la aflicción un estado emocional del alma, no podemos ninguno de nosotros tomar como normal éste mal estado, ya que siendo así, se vuelve parte del alma y queda una malformación en ella, que traerá un retroceso progresivo para la persona. El fracaso jamás será una alternativa para el hombre pues nuestro DIOS nos lleva de VICTORIA EN VICTORIA, DE BENDICIÓN EN BENDICIÓN.

SALIR DE LA AFLICCIÓN: Con DIOS es la única manera de ser libre de la aflicción, porque la aflicción es una maldición que se manifiesta en el alma y por eso sólo DIOS trae verdadera libertad por JESUCRISTO; ÉL venció con la resurrección, la muerte en la cruz. JESUCRISTO se hizo maldito para que nosotros recibiéramos bendición, ya que la cruz es símbolo de maldición (Gálatas 3: 13 "Cristo no redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición, porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero). En la cruz quedó clavado todo lo que hace maldito al hombre y triunfa CRISTO al resucitar porque vence de esa forma la maldición.

OREMOS: PADRE ETERNO, DIOS SOBERANO, SEA SIEMPRE VIVIFICADA MI VIDA POR TU VERDAD, LÍBRAME DEL LAZO DEL ENEMIGO Y DE TODA PESTE DESTRUCTORA, SEA EN EL CUERPO O EN EL ALMA, PUES TU MISERICORDIA PARA CONMIGO ES GRANDE; PADRE QUE PUEDA YO GOZARME EN TU PRESENCIA Y NO SE ENSEÑOREE NINGUNA AFLICCIÓN DE MI, PORQUE BENDITO ME HAS LLAMADO Y BENDITO QUIERO PERMANECER, NADA EN MI SER ME DAÑE, PORQUE DE CONTINUO ALABARÉ TU NOMBRE, TODOS LOS DÍAS QUE CUENTE CON VIDA EN ÉSTA TIERRA, PUES CONFORME A TUS JUICIOS CAMINARÉ. ME DELEITO EN TU PRESENCIA SEÑOR, YO ME GOZO SÓLO EN TI. SEAN MIS DICHOS GRATOS DELANTE DE TI Y CON TODO MI SER TE HONRO, EN EL NOMBRE DE JESUCRISTO AMÉN.