1 TIMOTEO
4:7 Desecha las fábulas profanas y de viejas. Ejercítate para la piedad;
4:8 porque el ejercicio corporal para poco es provechoso, pero la piedad para todo aprovecha, pues tiene promesa de esta vida presente, y de la venidera.
4:9 Palabra fiel es esta, y digna de ser recibida por todos.
4:10 que por esto mismo trabajamos y sufrimos oprobios, porque esperamos en el DIOS viviente, que es el SALVADOR de todos los hombres, mayormente de los que creen.
4:11 Esto manda y enseña.
4:12 Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en PALABRA, CONDUCTA, AMOR, ESPÍRITU, FE Y PUREZA. AMÉN.
LA DISCIPLINA: Es la instrucción con patrones de comportamiento estables, con un orden para responder con una conducta determinada, con el fin de capacitar en una área, labor u oficio. La disciplina está relacionada estrechamente con la forma de comportarse en diversas situaciones y ambientes. Para poder ser disciplinados debemos estar emocionalmente estables, quiere decir que se cuente con una conexión inteligente, entre el cuerpo (el hablar y hacer) con la mente (en que se piensa). El único dador de equilibrio emocional y conexión inteligente es DIOS. Si queremos mantenernos enfocados en la carrera de la vida, en una prosperidad continua, debemos ejercitarnos en una disciplina espiritual, que nos permita conocer y entender de DIOS, para perseverar en la comunión con DIOS, y en la unidad con el ESPÍRITU SANTO poder ir cada día despojándonos de todo peso y del pecado que nos asedia, caminando con paciencia, sin prisa pero sin pausa, hacia el cumplimiento de una vida con frutos dignos.
Los frutos dignos son todas aquellas cosas que pensamos, hablamos y hacemos en acuerdo con DIOS, porque recordemos que la voluntad de DIOS es buena, agradable y perfecta.
Ser ejemplo de los creyentes en:
1- PALABRA: Es importante aprender a hablar, que con nuestras palabras enriquezcamos a otros, ya que se nos dió el poder para crear vida o llevar a muerte por la palabra. La palabra es para exhortar (mostrar el error), consolar (todo tiene salida para solucionar) y edificar (avanzar y crecer).
2- CONDUCTA: El comportamiento unido a la sana palabra hace al hombre disciplinado y enteramente preparado para toda buena obra que honra a DIOS.
3- AMOR: Si la motivación en nuestra alma se ha cimentado en el amor, nuestras percepciones y manifestaciones serán correctas.
4- ESPÍRITU: Somos espíritu dentro de un estuche (cuerpo) perecedero, y es por eso que se hace necesario al hombre conocer que espíritu nutre su espíritu, porque si es el ESPÍRITU SANTO DE DIOS, irás en crecimiento, de lo contrario en cualquier momento desfallecerá tu ser.
5- FE: Esa medida de fe que DIOS ha dado a cada uno, se debe dirigir completamente hacia DIOS, porque es ÉL la fuente que la nutre de certeza, de la convicción de que no en vano se espera. DIOS no mentirá, ÉL es fiel a sus promesas y respalda su palabra por amor a su nombre.
6- PUREZA: JESUCRISTO nos hizo puros, nos santificó, y para permanecer en esa pureza debemos decidir atender continuamente la instrucción de DIOS, la obediencia a DIOS no se negocia, ni se razona, porque la palabra se hace vida en cada uno, meditando con entendimiento para ser sensatos en nuestros actos.
SER EJEMPLO DE LOS CREYENTES NO ES FÁCIL, PERO JESUCRISTO NOS DA LA FORTALEZA.
DICE LA SANTA BIBLIA, QUE NO NOS CANSEMOS DE HACER EL BIEN, PORQUE RECIBIREMOS DE DIOS RECOMPENSA.
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