Devocional Diario: DIOS ES EL FARO DEL HOMBRE

PROVERBIOS 20: 4-10

NUESTRO GUÍA ES DIOS, EL QUE PIERDE LA  MIRADA DE ÉL, NO LLEGARÁ A NINGUNA PARTE  A SALVO, PUES SE CONFUNDIRÁ POR SUS PROPIOS CONSEJOS

20:4 El perezoso no ara a causa del invierno; 
Pedirá, pues, en la siega, y no hallará. 
20:5 Como aguas profundas es el consejo en el corazón del hombre; 
Mas el hombre entendido lo alcanzará. 
20:6 Muchos hombres proclaman cada uno su propia bondad, 
Pero hombre de verdad, ¿quién lo hallará? 
20:7 Camina en su integridad el justo; 
Sus hijos son dichosos después de él. 
20:8 El rey que se sienta en el trono de juicio, 
Con su mirar disipa todo mal. 
20:9 ¿Quién podrá decir: Yo he limpiado mi corazón, 
Limpio estoy de mi pecado? 
20:10 Pesa falsa y medida falsa, 
Ambas cosas son abominación a YAHWEH. AMÉN.

LA PEREZA: Es la falta de ánimo o de disposición para hacer algo. Es el descuido al realizar acciones, movimientos o trabajos, o al realizarlos se hacen sin importar los resultados; es hacer las cosas de cualquier forma. La pereza se manifiesta en la persona que evita realizar cualquier actividad de la cual no recibe un beneficio al instante, El perezoso carece de motivaciones. La pereza es la pasión de la inacción.

MEDITACIÓN UNIDA: Cuando miramos la LUZ DEL FARO DIVINO, podemos darnos cuenta y entender que si vivimos el hoy trabajaremos para el mañana y el consejo de DIOS nos llevará a VICTORIAS continuas, despojándonos de todo peso que nos acedia. No dejemos que la pereza tome lugar en nuestra alma, porque endurece el alma y su consejo nos lleva a fracasar.

DETECTAR LA PEREZA: La pesa falsa y la medida falsa se activan en el alma del ser humano cuando tiene nido la pereza, porque siempre procurará llevar a la persona perezosa, a obtener cosas con menos esfuerzo, engañando a los demás para tomar ventaja del trabajo de otro. El pensamiento de hacer lo menos posible y adquirir beneficio, es inicio de falta de esfuerzo, de pereza. El perezoso procurará que todo se lo hagan y después pedirá el beneficio.

DECISIÓN SABIA: Los seres humanos fuimos diseñados para estar en actividad constante, por eso es que aún al reposar en la noche, seguimos en actividad con los sueños. La decisión de no caer en la pereza es personal y se inicia cuando trabajo para ver lo que anhelo tener. En la vida espiritual es igual, la comunión con DIOS me mantiene activo, procuro lo recto y obtengo lo justo.

DIOS NO RESPALDA AL PEREZOSO PORQUE DESDE EL PRINCIPIO SU INSTRUCCIÓN HA SIDO QUE EL HOMBRE SE ENSEÑOREE DE TODO Y PARA PODER ENSEÑOREARSE, DEBE CONQUISTAR CON ESFUERZO Y TRABAJO. SHALOM.