martes, 24 de septiembre de 2013

Devocional Diario: 3- HIJOS DE DIOS POR CONVICCIÓN

JUAN
1:12 Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de DIOS; 
1:13 los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de DIOS. AMÉN.

DIOS es creador de todo y DIOS sobre todas las cosas, tanto las visibles como las invisibles, gobierna sobre todo y es REY de Reyes y SEÑOR de Señores, absolutamente todo se sujeta a su señorío, pero no es PADRE para todos, porque no todos han recibido al HIJO DE DIOS en su ser, como SEÑOR Y SALVADOR y por eso no creen en JESUCRISTO, que existe y está sentado a la diestra del PADRE, JESUCRISTO REVELÓ AL DIOS PADRE.

JESUCRISTO nos dió la dádiva de ser hechos HIJOS DE DIOS, no engendrados de sangre, ni de voluntad de hombre, pues fué decisión de DIOS escogernos por hijos, para SACARNOS de tinieblas, de maldición y llevarnos para ser colocados en lugares celestiales, estábamos muertos en delitos y pecados, muertos en el espíritu y activados en las emociones del alma, por ser el primer hombre, Adán, un Alma viviente pero por JESUCRISTO fuimos hechos espíritu vivificante, porque creemos en el HIJO DEL PADRE, JESUCRISTO y ÉL nos acercó al PADRE. 
La palabra de DIOS, LA SANTA BIBLIA, habla también de otros hijos que son del Diablo, JESUCRISTO lo dijo, vosotros sois de vuestro padre el diablo, y los deseos de vuestro padre queréis hacer. El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la VERDAD, porque no hay VERDAD en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira.

Al estar muertos en el espíritu por no tener una comunión con DIOS y activados en el alma, hay indisciplina en pensamientos, palabras y actos, por eso es que se deposita en el alma muchas cosas inadecuadas que enferman el alma y el cuerpo. Tener la unidad en el espíritu con el ESPÍRITU SANTO hará que empecemos a conocer y entender muchas de las cosas que nos rodean, porque es allí donde está LA VERDAD.

El que es de DIOS la palabra de DIOS oye y obedece.
OREMOS: PADRE AMADO, DIOS GLORIOSO, SEÑOR EN ÉSTA HORA QUIERO VENIR ANTE TU ALTAR, PARA PEDIR POR TODOS AQUELLOS QUE NO CONOCEN DE TI, PEDIR MISERICORDIA POR TODOS AQUELLOS QUE SE ENCUENTRAN CONFUNDIDOS Y HAN SIDO LLEVADOS A MALDICIÓN, PEDIR QUE POR EL PODER DE TU SANTO ESPÍRITU, LA PALABRA SANTA GERMINE, PORQUE SÉ QUE TU PALABRA HA SIDO ENTREGADA Y OÍDA POR MUCHOS, POR ESO ORO PARA QUE TODO CORAZÓN ENDURECIDO SEA CAMBIADO, PADRE LA GENTE NECESITA DE TU AYUDA, PADRE LA GENTE ESCUCHA MUCHAS COSAS Y NO ENTIENDE COMO MANEJARLAS, POR ESO SEÑOR CREO QUE SI TU TIENES MISERICORDIA DE ELLOS Y LOS AYUDAS, ELLOS CONOCERÁN QUE TU ERES PADRE Y DIOS, EN EL NOMBRE DE JESUCRISTO. AMÉN.  

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