jueves, 31 de octubre de 2013

Devocional Diario: 30 LA BIBLIA ES LA PALABRA DE DIOS

SALMOS 119
119:157 Muchos son mis perseguidores y mis enemigos,
Mas de tus testimonios no me he apartado.
119:158 Veía a los prevaricadores, y me disgustaba,
Porque no guardaban TUS PALABRAS.
119:159 Mira, oh YAHWEH, que amo tus mandamientos;
Vivifícame conforme a tu misericordia.
119:160 La suma de tu palabra es verdad,
Y eterno es todo juicio de tu justicia. AMÉN.

ENEMIGO: Es aquel que entra en enfrentamientos, en contiendas, en rivalidades, en luchas, y como opositor desarrolla mala voluntad hacia otro y su intención es desearle mal y llegar a hacerle mal. Es la expresión del desacuerdo extremo, que lleva a peligro por estar en oposición. El enemigo es aquel que está en contra de otro y quiere verle destruido. El enemigo es aquel que se levanta en conflicto con el firme propósito de destruir la vida de otros.

PREVARICADOR: Es cuando una persona que está en autoridad dicta una resolución a sabiendas de que es injusta, es la actuación que se manifiesta en un abuso de la autoridad, aquel que conduce a otro a faltar a la verdad.

QUE DICE DIOS: La palabra es muy clara aún al enseñarnos que no debemos contender, "recibid al débil en la fe, pero no para contender sobre opiniones", la decisión a la que DIOS nos quiere llevar es a no poner tropiezo u ocasión de caer a nadie, buscar el bien y no lo malo, aborreciendo el mal, y amando el bien, bendiciendo a los que nos maldicen, haciendo bien a los que nos aborrecen, y orando por los que nos ultrajan y persiguen, guardémonos de hacer justicia delante de los hombres, pues DIOS ES EL JUEZ, y la parte que nos corresponde a cada uno, es a que no se puede andar con otro si no se está en acuerdo, DIOS concluirá el resto.
El desacuerdo no es senda para la enemistad, se trata de alejarse de lo que trae contienda, y seguir avanzando de la mano de DIOS, pues la oposición a LA PALABRA DE DIOS la pesa DIOS, quien es su inspirador y conocedor de ella.

OREMOS: PADRE, REY Y SEÑOR, DUEÑO DE TODO Y GOBERNADOR SOBRE TODO, BENDICE NUESTRA VIDA Y LIBRANOS DEL MAL, QUE NO ME APARTE DE TUS TESTIMONIOS PARA QUE EN TU PALABRA SIEMPRE ESTE MI MEDITACIÓN, GUÁRDAME PARA NO PERDER MI LUGAR CUANDO LOS QUE SE OPONEN Y LEVANTAN CONTIENDAS VENGAN CONTRA MI, PORQUE NO PARTICIPARE DE LO QUE CONDUCE A LA ENEMISTAD, PUES NO ME OLVIDO DE QUE ETERNO ES TODO JUICIO DE TU JUSTICIA Y QUE LA SUMA DE TU PALABRA ES VERDAD, Y DARÁ BENDICIÓN A TODO AQUEL QUE EN ELLA HA SIDO EJERCITADO Y SE HA FORTALECIDO EN FE, POR LA AYUDA DEL ESPÍRITU SANTO Y EL PODEROSO NOMBRE DE JESUCRISTO. AMÉN. 

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